Nuestra misión es que los niños formen una comunidad en la que tengan una experiencia de cercanía con Dios y la Virgen María como miembros de la Iglesia católica a través del carisma de Schoenstatt. Buscamos ayudar a que cada niño se desarrolle como un joven libre, generoso y seguro, capaz de enfrentar los desafíos de la vida con la confianza que da la certeza de saberse un hijo muy amado de Dios y discípulo de Jesucristo